
¿Se pueden congelar los rábanos?

Los rábanos son una excelente adición a su plan de dieta. Contribuyen en gran medida a la buena salud y tienen bastante presencia en la historia. Estas delicias crujientes están repletas de calcio, potasio, vitamina C, fibra y ácido fólico. Cada uno de los nutrientes que contiene lo hace merecedor de nuestra atención. Además de comerse solos, también se pueden combinar los rábanos con otros ingredientes para hacer una comida deliciosa.
Sin embargo, los rábanos tienen una duración limitada cuando se conservan a temperatura ambiente. Si tienes una gran cantidad de rábanos en casa (sea cual sea el motivo), necesitarás conservarlos para que no se estropeen. Existen un par de métodos para conservar los rábanos, y quizá te preguntes si la congelación es uno de ellos.
¿Se pueden congelar los rábanos? Sí, se pueden congelar. Congelados, se conservan hasta 6 meses. Si no busca una conservación a largo plazo, puede poner los rábanos en el frigorífico, lo que le proporcionará unas 2 semanas de conservación.
Curiosamente, también puedes conservar los rábanos enterrándolos en la tierra -hablaremos de esto más adelante en el artículo-. Sin congelar, refrigerar o enterrar en la tierra, tus rábanos sólo pueden durar un máximo de 3 días.
Para conservar los rábanos mediante congelación, hay que seguir unos pasos adecuados. Aunque debes saber que la textura crujiente de los rábanos disminuirá inevitablemente después de pasar algún tiempo en el congelador. Para disfrutar de los rábanos en su forma más crujiente, es mejor comerlos al principio del proceso de congelación.
Congelación de rábanos
Como hemos establecido anteriormente, es posible conservar los rábanos mediante congelación. Sin embargo, debes seguir los pasos adecuados si quieres obtener los mejores resultados. Si vas a utilizar los rábanos muy pronto, puedes dejarlos a temperatura ambiente; así tendrás unos 3 días antes de que se estropeen. La refrigeración también permite conservarlos durante una semana antes de que se estropeen.
Independientemente de todas estas otras alternativas para conservar los rábanos durante un largo periodo de tiempo, la congelación es la mejor, aunque no ofrece la mejor calidad. Si va a preparar ensaladas frescas con los rábanos, lo mejor es utilizarlos inmediatamente, cuando aún están frescos. La congelación es una opción más adecuada si piensas cocinar con ellos más adelante.
Cómo congelar rábanos
Es importante que sigas los pasos correctos a la hora de congelar rábanos. Congelarlos de forma incorrecta hará que los rábanos pierdan su sabor y textura originales con bastante rapidez.
Aunque la textura cambiará con el tiempo, puedes ralentizar el ritmo de cambio mediante una congelación correcta. Para congelar los rábanos, siga estos sencillos pasos:
- Primero hay que limpiar la suciedad de los rábanos. No tiene sentido meter los rábanos sucios directamente en el congelador. Si lo haces, estropearás el congelador y tendrás más trabajo después. Si has comprado los rábanos en el supermercado, es posible que no estén tan sucios como si los hubieras arrancado del jardín. Puedes lavarlos con agua fría para quitarles la suciedad. Pon los rábanos bajo el grifo y lávalos hasta que estén bien limpios.
- Ahora que los rábanos están limpios, procede a recortar su extremo radicular y los tallos. Ten en cuenta que no debes pelar la piel de los rábanos. Simplemente recórtala para que quede más ordenado. Una vez metidos los rábanos en el congelador, contarás con que su piel te servirá de protección extra.
- En lugar de congelar el rábano entero, es mejor cortarlo en trozos más pequeños. Puede partirlo por la mitad o cortarlo en cuatro trozos. La razón de cortarlos en trozos más pequeños es que congelarlos enteros hace que la piel se agriete.
- El siguiente paso es escaldar los rábanos. ¿Qué significa esto? Para escaldar los rábanos, colóquelos en un recipiente con agua hirviendo durante unos 4 minutos. El objetivo de escaldar los rábanos es reducir su velocidad de maduración. Si se consigue ralentizar su maduración, los rábanos durarán más tiempo en el congelador. El escaldado también conserva el color original de los rábanos.
- Una vez transcurridos los 4 minutos, saca los rábanos del interior del agua hirviendo y ponlos en un bol con agua helada. Cuando los rábanos se hayan enfriado, vierte el agua y déjalos secar.
- Por último, coge los trozos de rábanos escaldados y guárdalos en bolsas para congelador con cierre. También puede escribir la fecha actual en las bolsas de congelación para controlar el tiempo.
Cómo descongelar rábanos congelados
Descongelar rábanos congelados es un proceso sencillo y directo. Cuando vaya a utilizar los rábanos congelados, sáquelos del congelador y páselos por agua fría. Este proceso es bastante rápido y los rábanos se descongelarán en un santiamén.
Debes saber que no podrás recuperar exactamente la misma calidad después de congelar los rábanos. Si quieres obtener el sabor más fresco de los rábanos, tendrás que cocinarlos y comerlos inmediatamente.
Cómo conservar los rábanos en la tierra
Una alternativa eficaz a la congelación es almacenar los rábanos en tierra. Se trata de una forma interesante y eficaz de conservar los rábanos, ya que se conservan durante unos 3 meses. A continuación te indicamos los pasos que debes seguir para conservar los rábanos en tierra:
- Consigue una caja lo bastante grande para contener todos los rábanos y pon tierra húmeda en ella.
- A continuación, coloca los rábanos que desees conservar en la tierra; deja que todo el cuerpo del rábano quede cubierto de tierra, pero las partes verdes pueden quedar por encima.
- Localiza una zona oscura de tu casa, como el sótano, y coloca allí la caja llena de tierra.
- Asegúrate de que la tierra se mantiene húmeda de vez en cuando.
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